“A partir de hoy, la UE somos nosotros” proclama orgullosa en portada la Gazeta Wyborcza. A las doce en punto del mediodía en el Sejm, o Parlamento polaco, el primer ministro húngaro Viktor Orban entregará oficialmente la presidencia rotatoria de la UE a Polonia. El próximo medio año se plantea como una gran prueba tanto para el gabinete de centro-derecha del primer ministro Donald Tusk como para la clase política polaca en su conjunto. “Si lo gestionamos bien, nos convertiremos en uno de los pilares de la UE, como Alemania y Francia”, declara el diario de Varsovia.
Dziennik Gazeta Prawna advierte, sin embargo, que la presidencia es un reto “logístico e intelectual” y que el truco consiste en no hablar de varias decenas de prioridades, sino en “darse verdaderamente cuenta de las pocas que son realmente cruciales”.
Rzeczpospolita también emite una advertencia, al subrayar que Varsovia se hace cargo de la presidencia de la UE en un momento en el que “Europa teme por su futuro” – “en Grecia se mantiene un estado de emergencia informal” mientras los españoles y los portugueses se quedan sin agujeros en los que poder seguir apretándose el cinturón. Mientras tanto, Polska The Times sugiere que, siendo una acérrima defensora de la integración europea, Polonia puede desempeñar un papel fundamental en la actual “lucha entre euroescépticos y eurooptimistas” en que se encuentra sumida Europa.
Fuente: Presseurop